jueves, 12 de agosto de 2010

Que lo digan otros...

En el poco tiempo libre que me va quedando, he ido dándole vueltas al modo de comentar esta canción que he compartido con vosotros. Esta es una copla de las que a mí especialmente me duele y, quizás por eso, mis palabras no sean capaces de resumir su significado. Así que esta vez he pedido prestado un poema que también lo dice todo...mucho más que yo, para que sirva de llave y se cierre ese circulo vicioso en el que muchas veces se convierten las historias.
Como siempre, y hoy con este poema...Te doy mi copla

PUEDO escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

martes, 3 de agosto de 2010

me hiciste de este modo...

No lo tomes tanto a pecho
Que yo soy como has querío
En tus hogueras me has hecho
Igual que al bronce fundío
Ni un latío
Ni un sollozo
Ni una pena
Ni un orgullo
Nada es mío
Y hasta el gozo y el sollozo
Que me apena
Todo es tuyo, sólo tuyo

Aunque me veas un día
En otros brazos temblar
Puedes decir, alma mía,
Esta tremenda verdad:
“ Esa mujer,
toa la via, toa la vía,
sólo mi espejo será;
esa mujer toa la vía
sólo, sólo mi espejo será”

Uno me ofrece brillantes,
Y otro me quiere de veras,
poco después o poco antes
se va a rendir mi bandera.
Tú me hiciste de este modo
Mi destino fue tu orgullo
Yo soy todo
Rosa triste, cielo y lodo
Mi pecado…
Todo es tuyo
Sólo tuyo

Aunque me veas un día
En otros brazos temblar
Puedes decir, alma mía,
Esta tremenda verdad:
“ Esta mujer,
toa la via, toa la vía,
sólo tu espejo será;
esta mujer toa la vía
sólo, sólo tu espejo será”